Frontline Initiative: Los DSP utilizan el Código de Ética del NADSP

La familia importa

Autor

Darryl Lewis es coordinador de capacitación y especialista en DSP de ADAPT Community Network en Nueva York, Nueva York. Puede ponerse en contacto con Darryl en el correo electrónico d.lewis@adaptcommunitynetwork.org.

Un hombre con traje negro y una corbata de moño naranja sonríe a la cámara. Con una mano hace el signo de la paz.

Darryl Lewis, autor.

Mientras trabajaba en un programa residencial conocí a un hombre llamado James Green. James era un caballero de edad avanzada que se mantenía al margen la mayor parte del tiempo. Al igual que las personas con las que vivía, James recibía apoyo, pero a diferencia de ellas, él no tenía visitas familiares. La mayor parte del personal solo se relacionaba con James por motivos de trabajo; en realidad, nunca mantenían una conversación significativa con él.

Un día James estaba sentado en el patio y decidí sentarme con él. Entablé conversación con James y le pregunté por su familia. James me dijo que solo tenía un hermano, que murió en un incendio. Le dije: “Vaya, siento mucho escuchar eso”. También me dijo que no pudo ir al funeral porque fue en Nueva Jersey. James comenzó a llorar porque se sentía culpable por no haber asistido al funeral ni haber visitado la tumba de su hermano. Después de nuestra charla, decidí hablar con el gerente y el trabajador social de la casa sobre James. Dijeron que James no tenía hermano ni familiares.

James comenzó a llorar porque se sentía culpable por no haber asistido al funeral ni haber visitado la tumba de su hermano.

Al día siguiente volví a hablar con James sobre su hermano y le pregunté si me estaba diciendo la verdad. James dijo que sí y me dio el nombre de su hermano y la pequeña ciudad de Nueva Jersey donde vivía. En mi tiempo libre, empecé a buscar información sobre el hermano de James. Descubrí que James decía la verdad. Su hermano murió en un incendio. Para mi sorpresa, el hermano de James tenía esposa e hijos y ahora vivían en Queens, Nueva York. Informé a James de las buenas noticias y se emocionó mucho. Le pregunté a James si quería llamar y presentarse por teléfono. James estaba un poco nervioso por llamar y me preguntó si yo podría llamar por él. Puse el teléfono en altavoz e hice la llamada; la cuñada de James quería conocerlo. Le informé a la encargada de nuestras buenas noticias y se alegró mucho de que James fuera a conocer por fin a parte de su familia.

Su cuñada lo visitó y le trajo fotos de su hermano y de otros familiares. James estaba tan emocionado que la estaba presentando a todos en la casa. James también conoció a sus dos sobrinos, y se hicieron muy cercanos. Incluso llevaron a James a Nueva Jersey para visitar la tumba de su hermano. La vida de James cambió por completo tras conocer a su familia. Empezó a salir más y a implicarse en actividades en casa y en su programa. James quería tener algo de qué hablar con su familia cuando hablara con ellos. Todos estaban muy contentos de que James por fin disfrutara de la vida. El equipo me dio las gracias por no rendirme y completar el papeleo necesario para ayudar a James a encontrar a su familia.

Estaba decidido a ayudar a James a encontrar a su familia a toda costa, y utilizando prácticas centradas en la persona y velando por su bienestar emocional, pude ayudarle a conseguir su sueño de tener una familia.

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