Frontline Initiative: Los DSP utilizan el Código de Ética del NADSP
Apoyar a Robert en los servicios autodirigidos
Como persona apoyada y como DSP, Robert y James tienen una gran relación.
Soy un profesional de servicios de apoyo (SSP, por sus siglas en inglés), a veces denominado profesional de apoyo directo (DSP, por sus siglas en inglés), que trabaja para y con un hombre de 36 años, Robert Z. Robert autogestiona sus servicios. Utiliza el modelo de Servicios Dirigidos al Participante para gestionar sus servicios donde vive en Pensilvania. Robert selecciona, contrata y gestiona a su personal para que le ayude. Soy uno de los seis SSP que trabajan para y con Robert.
Como SSP, ayudo a Robert en su planificación diaria y en sus decisiones para llevar a cabo sus tareas laborales y las actividades de ocio que le gustan. Consultamos su Google Calendar para ver lo que tiene que hacer en un día determinado y, a continuación, planificamos las reuniones, citas médicas o actividades que le gustaría hacer.
Aunque Robert tiene problemas físicos y es un comunicador no tradicional, siempre tiene el control de su vida y sus decisiones. Participa en todas las actividades lo mejor que puede y pide ayuda cuando la necesita. Se le anima a que haga todo lo que pueda físicamente y sabe que estamos aquí para ayudarle si lo necesita.
Robert decide lo que quiere hacer cada día e informa a sus SSP cuando llegamos al trabajo. Ayudar a Robert a ser lo más independiente posible es una de las principales funciones de mi puesto. Robert es un valioso miembro de nuestra comunidad cuya voz debe ser escuchada. Hago lo que haga falta para ayudarle en todo lo que quiera hacer con su vida y para amplificar su voz cuando sea necesario.
Cuando tenemos tiempo libre, comparto con él mis conocimientos y mi amor por la música y el entretenimiento para ampliar su afición por la música y el cine. A Robert le encantan los libros de terror, ciencia ficción, naturaleza e historia, así que frecuentemente leemos libros juntos. Vamos a galerías de arte para aumentar su interés por el arte y esto puede inspirarle a crear sus propias piezas: él es un artista talentoso y creativo.
Robert conoce sus responsabilidades en el trabajo, en casa y como voluntario en su comunidad. Trabajamos juntos para cumplir su lista de tareas pendientes. A veces necesita un descanso porque no se siente bien o tiene un mal día, como todo el mundo. Le ayudo a comunicárselo a su empleador y a sus compañeros, y reprogramamos sus tareas para otro día.
Mi relación con Robert me inspira a ser mejor persona y a vivir la vida al máximo. Sus capacidades pesan más que su discapacidad y su sencilla alegría de abrazar la vida y superar los obstáculos es una inspiración para mí. Ayudar a Robert a vivir su vida como él quiere, ofreciéndole apoyo, asistencia y opciones, es una gran parte de lo que hago. Considero a Robert un amigo al que aprecio profundamente, y hago lo que puedo para ayudarle a conseguir lo que quiera en su vida. Siempre me pregunta qué hago cuando no estoy con él y disfruta viendo los videos de karaoke que subo en Facebook. Me enorgullece verle triunfar en su vida profesional y personal.
Robert tuvo algunos problemas médicos hace unos años. Por eso, ayudo a Robert a controlar su bienestar físico y emocional y, si noto un cambio en su estado de ánimo, lo documento para buscar un patrón. Asisto a Robert con todas sus necesidades de cuidado personal y también le ayudo a seguir un plan dietético debido a sus problemas médicos anteriores y documento todo lo que come. Lo utilizamos para hacer un seguimiento de los cambios en la salud, de modo que podamos intervenir rápidamente y prevenir emergencias. La salud y la seguridad de Robert son mis mayores preocupaciones laborales. Documento sus patrones de sueño y el rechinar de dientes porque hemos aprendido que los cambios en estos indican un posible problema de salud. Cuando a Robert le duela la cabeza, dirá que le duele y cuando le pregunten si quiere ibuprofeno, responderá que sí. Robert también toma aceite de CBD, que le ayuda a aliviar el dolor. Tiene una silla de ruedas reclinable que utiliza cuando le molesta la espalda y una almohada para apoyar la cabeza. Escuchando a Robert y sabiendo cómo se comunica, ya sea con la voz, las acciones o la mirada, puedo determinar lo que pide o lo que necesita para mantenerse seguro, sano y activo en su comunidad.
No conocía el Código de ética de la NADSP hasta que me pidieron que colaborara en este artículo. Creo que el apoyo que presto a Robert, bajo su orientación y supervisión, favorece su autodeterminación y su bienestar físico y emocional. Robert se autodirige y controla gran parte de su jornada. Los SSP seguimos su ejemplo. En situaciones en las que la persona apoyada no asumiera ese tipo de liderazgo, o si un DSP intentara controlar la situación, el Código de ética sería una guía útil para ayudar a corregir la forma en la que el DSP se relaciona con la persona apoyada.