Número especial sobre la transición en un contexto global para las personas con discapacidad intelectual, del desarrollo y otras discapacidades
Cómo enfrentar los retos en España
En España existen servicios de transición previa al empleo para los estudiantes con discapacidad de 16 a 21 años o matriculados en educación secundaria o postsecundaria. Estos servicios tienen como objetivo proporcionar programas eficaces de transición en la escuela secundaria que les preparen para un empleo integrado y competitivo. La transición a la vida adulta es uno de los procesos más complejos a los que se enfrentan las personas con discapacidad intelectual en España. De acuerdo con la Encuesta sobre Discapacidad, Autonomía Personal y Dependencia (Instituto Nacional de Estadística, 2020), sólo el 27% de los adultos con discapacidad en edad de trabajar están empleados.
Marco legislativo
La promulgación en 1982 de la Ley de Integración Social de los Minusválidos (LISMI, 1982) marca un antes y un después para las personas con discapacidad. La Ley establece una serie de medidas destinadas a integrarlas más plenamente en sus comunidades. Se establece el objetivo de incorporar a las personas con discapacidad al sistema de empleo ordinario y, cuando no sea posible, al empleo protegido. Entre los servicios catalogados como protegidos, destacan los centros especiales de empleo y los talleres protegidos (centros ocupacionales). Estos servicios para adultos, ya sean ocupacionales, laborales, de día o de ocio, están organizados principalmente por entidades privadas. A diferencia de los servicios que se prestan durante la edad escolar, no existen planes de estudio comunes en los servicios postescolares organizados.
Desde el inicio de la década de los 90, aparecen un número creciente de iniciativas de integración laboral bajo la denominación de empleo con apoyo y personalizado, como consecuencia de la promulgación de la Ley de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE, 1990). Esta Ley establece la inclusión de los servicios de educación especial en el sistema educativo ordinario e introduce el concepto de "necesidades educativas especiales", haciendo hincapié en los apoyos y no en la discapacidad. Jordán de Urríes y sus colegas (2005) de la Universidad de Salamanca y el Observatorio Estatal de la Discapacidad (2020) aportan datos cuantitativos respecto al empleo con apoyo, demostrando el aumento de estas iniciativas en España: Seis de cada 10 personas que participan en programas de empleo con apoyo son hombres; tienen discapacidad intelectual (73,40%); el 29% son menores de 25 años, y el 5,32% han pasado al mercado laboral ordinario. Una norma legal de 2007, recientemente modificada, reguló el empleo con apoyo y personalizado como medida de fomento del empleo de las personas con discapacidad en el mercado laboral ordinario, y actualmente está en vigor.
Estructura y organización de los programas postescolares
En España, todos los alumnos cursan la educación básica obligatoria hasta los 16 o 18 años, en función de sus capacidades y su evolución personal. A partir de esa edad, deben desarrollar otros aprendizajes, habilidades y destrezas que faciliten su posterior incorporación a la vida laboral a través de programas de formación para la transición a la vida adulta. Un real decreto regula estos programas y cada centro educativo adapta su currículo a la población que atiende.
Los programas de formación para la transición a la vida adulta se organizan en un ciclo de dos años, que pueden ser prorrogados para la formación complementaria o la capacitación laboral. En ellos se incluye la formación en autonomía personal para la vida diaria; la integración social y comunitaria; y las vocaciones.
Los alumnos con discapacidad que terminan la educación básica a los 16 años sin haber alcanzado los objetivos de la educación secundaria obligatoria pueden continuar su escolarización en tres opciones diferentes relacionadas con la formación profesional:
- Inscripción en un programa de Formación Profesional Básica (BVT) en centros ordinarios (hasta los 19 años, ampliable hasta los 21) que se adapta a sus capacidades y desarrollo.
- Inscripción en un programa de Formación Profesional Básica Especial (SBVT) organizado en torno a las siguientes áreas: formación básica, orientación profesional, formación profesional, actividades complementarias y orientación educativa. Los programas BVT y SBVT se imparten en centros de secundaria y en escuelas especiales.
- Inscripción en un programa de transición a la vida adulta. Estos programas están diseñados para estudiantes con discapacidades significativas y generalmente se imparten en escuelas especiales. La prioridad es ayudar a los alumnos a desarrollar su independencia y apoyarlos para que realicen actividades ocupacionales relacionadas con trabajos claramente definidos.
Principales obstáculos
Los principales obstáculos a los que se enfrentan los alumnos con necesidades especiales, sus familias y los profesionales en la transición de la escuela a los servicios de empleo son los siguientes:
- Acceso a la educación y al entrenamiento. Los alumnos con discapacidades tienen las mismas opciones educativas que el resto de sus compañeros, sin embargo, en la práctica sólo se les ofrecen programas orientados a trabajos protegidos o peor pagados.
- Desconexión del mercado laboral. La preparación profesional suele estar desvinculada de la demanda del mercado laboral y de los intereses de los estudiantes.
- Las cifras/tasas de desempleo de los jóvenes con discapacidad son entre dos y tres veces superiores a las de los jóvenes sin discapacidad.
- Expectativas y actitudes. Los profesores, los padres, los empresarios y el público en general subestiman sus capacidades.
- Accesibilidad. Siguen existiendo problemas relacionados con la accesibilidad física al trabajo, así como con el acceso a ayudas personales y técnicas.
- Aplicación de la legislación vigente. Los marcos legales no están plenamente desarrollados, lo que produce contradicciones y paradojas. Por ejemplo, el acceso al empleo a través de cuotas de discapacidad no garantiza que el empleador adapte el puesto a la persona.
- El periodo de transición no tiene una consideración específica en la normativa educativa. No existen directrices curriculares precisas sobre las que organizar los apoyos y las acciones a realizar. Las decisiones se dejan a la discreción de los profesionales.
Cómo enfrentar estos retos
El establecimiento de un marco legal que reconozca la transición a la edad adulta y a la vida laboral como un objetivo básico de la educación secundaria y postsecundaria requeriría enfoques curriculares y directrices necesarias para que los profesionales puedan desarrollar y tomar decisiones sobre las opciones de formación en los programas obligatorios y postsecundarios.
Los profesionales deben centrar los servicios de transición en el empleo personalizado, a pesar de los retos que supone para los actuales proveedores de servicios. Se ha demostrado que es un modelo más inclusivo y eficaz que el mosaico de centros ocupacionales y de empleo con apoyo, que han creado discontinuidades en el camino de la transición.
Además, deben activar el liderazgo de equipos multiprofesionales para coordinar los procesos de transición. Su conocimiento y experiencia en procesos de asesoramiento les sitúa en una posición ideal para desempeñar un papel clave en los procesos de transición y en la articulación de las acciones necesarias. Por último, hay que revisar en qué medida los procesos educativos y de servicios sociales sitúan a los jóvenes y adultos con discapacidad en el centro del proceso de transición.
Estas recomendaciones apuntan a un nuevo escenario que, aunque muy lentamente, va ganando terreno (Pallisera, 2011). Se requiere un cambio actitudinal hacia una perspectiva inclusiva si queremos mejorar la transición al empleo y a la vida adulta de las personas con discapacidad, tal y como sugiere el Plan de Acción de la Estrategia Europea y Española sobre Discapacidad 2014-2020 (Observatorio Estatal de la Discapacidad, 2014).
Referencias
Instituto Nacional de Estadística. (2020). El empleo de las personas con discapacidad [Employment of people with disabilities.] https://www.ine.es/prensa/epd_2020.pdf
Jordán de Urríes, B., Verdugo-Alonso, M.A., & Vicent, C. (2005). Análisis de la evolución del empleo con apoyo en España. [Analysis of the evolution of supported employment in Spain.] Real Patronato sobre Discapacidad.
LISMI. (1982). Ley 13/1982, de 7 de abril, de Integración Social de los Minusválidos [Public Law 13/1982, of April 7, on Social Integration of People with Disabilities.] Boletín Oficial del Estado, 103, April 30.
LOGSE. (1990). Ley 1/1990, de 3 de octubre, de Ordenación General del Sistema Educativo [Public Law 1/1990, of October 3, on the General Regulation of the Educational System.] Boletín Oficial del Estado, 238, October 4.
Pallisera, M. (2011). Escenarios de transición para jóvenes con discapacidades de aprendizaje en España: Relaciones y discrepancias. Boletín Europeo de Necesidades Educativas Especiales, 26(4), 495-507.
State Disability Observatory. (2014). Plan de Acción de la Estrategia Española sobre Discapacidad: Informe de aplicación de la primera fase del Plan de Acción de la Estrategias Española sobre Discapacidad 2014-2020. [Action Plan of the Spanish Strategy on Disability: Report on the application of the first phase of the Action Plan of the Spanish Strategy on Disability 2014-2020.]
State Disability Observatory. (2020). Realidad, situación, dimensión y tendencias del empleo con apoyo en España en el horizonte del año 2020. [Reality, situation, dimension, and trends of supported employment in Spain in the horizon of the year 2020.] https://bit.ly/3cqH5NK