40 Big Ideas
32. Presunción de competencia
Creer en las posibilidades
Presumir competencia significa creer que alguien es capaz. Significa acercarse a las personas con discapacidad sin dar por sentado que no pueden hacer algo, incluso si piden ayuda.
Como persona con discapacidad, una de las cosas más poderosas que las personas pueden hacer por mí (Gage) es asumir que soy competente. Presumir competencia significa creer que soy capaz de aprender, crecer y alcanzar mis metas. Significa acercarse a mí con la mentalidad de que puedo hacer algo, aunque pueda necesitar apoyo adicional en el camino.
Esta creencia marca una gran diferencia en mi vida. Cuando estoy rodeado de personas que presumen de competencia, eso refuerza mi propia confianza en lo que puedo lograr. Cuando la gente duda de mis capacidades o asume que tengo limitaciones, eso crea barreras y me hace dudar de mí mismo. Las expectativas que los demás depositan en mí, ya sean altas o bajas, determinan cómo me veo a mí mismo y cuáles son mis objetivos.
Lo experimenté de primera mano cuando llegó el momento de pensar en mi transición después de la escuela secundaria. Muchos estudiantes con discapacidades son asignados a programas de transición tradicionales que se centran en habilidades funcionales, pero yo quería algo diferente. Sabía que quería cursar estudios universitarios junto a mis compañeros. Por desgracia, me encontré con personas que no creían que fuera capaz de tener éxito en la universidad. Tuve que luchar a través del debido proceso para tener la oportunidad de demostrar que estaban equivocados. Afortunadamente, también contaba con personas a mi lado que creían en mí y me dieron la determinación necesaria para seguir adelante. Gracias a su apoyo, pude completar mis estudios universitarios, obtener un título y seguir el camino que deseo para mi futuro.
La presunción de competencia también marcó mi trayectoria en el mundo de la oratoria. Siempre me ha apasionado compartir mi historia y usar mi voz para abogar por la inclusión. Un asesor educativo reconoció esa pasión en mí y supuso que era capaz de perseguirla. Ella no se limitó a decir: «No puedes hacer eso». En cambio, me ayudó a encontrar oportunidades para hablar en público y me dio las herramientas para crecer. Gracias a que ella creyó en mí, puedo adentrarme en espacios que nunca imaginé posibles.
Por eso ambos creemos que presumir la competencia es tan importante para todas las personas, con y sin discapacidad. Con demasiada frecuencia, se hacen suposiciones sobre lo que podemos o no podemos hacer antes incluso de que se nos dé la oportunidad de intentarlo. Estas suposiciones pueden impedirnos alcanzar oportunidades, sueños y metas. Pero cuando las familias, los amigos, los profesores, los empleadores y las comunidades optan por hacer la suposición menos peligrosa —que podemos hacer algo, abren las puertas al crecimiento y a las posibilidades.
Las personas que trabajan con personas con discapacidades o les prestan apoyo deben partir siempre del principio de que estas son competentes. Creemos que somos capaces. Danos oportunidades para intentarlo, aunque necesitemos adaptaciones o apoyo durante el proceso. El éxito puede ser diferente para cada persona, pero la oportunidad de alcanzarlo siempre debe estar ahí. Déjenos mostrarle cómo es el éxito.
A mis amigos y familiares: valoramos sus altas expectativas y su apoyo para alcanzar nuestros valiosos objetivos vitales. Ayúdanos a usar nuestras voces y seguir nuestros sueños.
A los educadores: desafíe los estereotipos y mantenga altas expectativas para los estudiantes con discapacidades.
A los empleadores: creer en el talento de los trabajadores con discapacidad y crear oportunidades para un empleo significativo.
A las comunidades: considérenos como participantes de pleno derecho que aportamos valor, ideas y liderazgo.
El mensaje es sencillo. Asuma la capacidad, no la limitación. Cuando confía en nosotros, puede sorprenderse de lo que somos capaces de lograr.